Noche cerrada en Kopciuszek una pequeña ciudad polaca. La nieve lo cubre todo, mientras un vigilante con las manos en los bolsillos va de un lado para otro, espera impaciente a iniciar su ruta diaria. La cámara de seguridad graba toda la escena cuando de repente como un mal presagio tres gatos negros atraviesan a gran velocidad el solitario lugar...
Segundos más tarde aparece un cuarto gato callejero que viene persiguiendo a sus compañeros de aventura. Se detiene y con gran educación como le enseñó su madre, una gata siamesa de alta alcurnia, pregunta: ¿No habrá visto usted por causalidad a mis tres amigos? A lo que el guarda de seguridad le responde de manera displicente señalando por donde han ido...
Todo esto con una banda sonora grabada con el sonido de una viola, un violín y un violonchelo no es superado ni por los Hermanos Grimm en su mejor época...
Vía │ Meridianos
1 comentario:
Jaja me encantó la historia de estos gatos!
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